Gretel
Gretel llegó con dos meses, mucha desconfianza y la fuerza suficiente para clavar sus colmillos muy profundamente en nuestros dedos. Protegía a su "frágil" hermano Gali a pesar de que él le doblaba el tamaño. Después de muchas dosis de amor aprendió a confiar y a buscar mimos y besos, y ahora es la más pegajosa. Sigue siendo muy buena hermana de Gali, y aunque no lo admita también quiere a Appa y Momo.
Le encanta acicalar a todos, incluyendo a gatos mucho mayores que ella y a sus mamás humanas.
Su madre gata le enseñó a maullar diciendo "ñeeeeee" y ella no lo cuestiona, ni siquiera ante el hecho de que solo Gali parece entenderle.
Ñeeee. ÑEEEE. ÑÑÑEEEEEEEEEEE.
¿Por qué me mirás raro? Mi madre gata me enseñó a hablar así.
El pelo de mi mami es lo más delicioso que olí en mi vida.
El pelo de mi mami es lo más delicioso que probé en mi vida.